Durante mi vida he buscado una respuesta a mi inquietud por entender al Ser humano como una persona íntegra y de buena fe. Tras varias experiencias que no acababan de llenar ese espacio encontré hace pocos años en el budismo, entendido tal cual, según sus orígenes, una
explicación a mis anhelos. Anteriormente a ese acercamiento al budismo y como consecuencia de una grave enfermedad, que a los años volvió a resurgir, me condujo a buscar soluciones para entender mi situación, aliviar el sufrimiento y aprender a aceptar mi realidad. Como quiera que fuera, acabé realizando un curso de Mindfulness y Compasión MBPM y se produjo un vuelco en mi vida de 360o, y comencé a entender y a aceptar mi realidad.
Me acerqué a la vida espiritual, conocí personas, entendí mi pasado, me formé en entornos académicos universitarios sobre espiritualidad y mindfulness, y decidí a propuesta de Dharmakirti formarme como profesor del programa de mindfulness y compasión MBPM.
La formación como profesor ha sido una nueva experiencia, enriquecedora, difícil en ocasiones, y sobre todo de aprendizaje en muchos sentidos.
Mi práctica diaria de atención plena, según la tradición budista, junto con la aportación del curso MBPM, hace que poco a poco entienda mejor la naturaleza humana, la mía.